12/3/12

El Inconsciente

El texto que sigue proviene de partes de la serie de cinco conferencias que dictó Carl Gustav Jung en el Instituto de Psicología Médica de Londres (Tavistock Clinic) del 30 de septiembre al 4 de octubre de 1.935.

"La psicología es ante todo una ciencia de la consciencia. En segundo lugar es la ciencia de los productos de la psique inconsciente. No tenemos los medios para la exploración directa de la psique inconsciente debido al hecho de que el inconsciente es precisamente inconsciente lo que hace que no podemos comunicar con él. Solo podemos tratar con los productos conscientes de los que suponemos derivan del ámbito de las "representaciones imprecisas" referencia que hace el filósofo Kant en su "Antropología del punto de vista pragmático" como si fuera un semi-mundo.

Cualquier cosa que podamos decir sobre el inconsciente, es nuestro espíritu consciente el que lo dice. La psique inconsciente, que es de naturaleza totalmente desconocida, no puede expresarse sino gracias a la consciencia y su lenguaje. Es imposible hacer de otro modo. Esto es insalvable y lo debemos tener siempre presente como aviso último a nuestro juicio.

La consciencia es una cosa muy particular. Es un fenómeno intermitente. Una quinta parte de nuestra vida, quizá un tercio inclusive la mitad ocurre en el estado de inconsciencia. Cada noche zozobramos en el inconsciente y es solamente por fases, entre vigilia y sueño, que nuestra consciencia es mas o menos clara. En ciertos aspectos, uno puede incluso preguntarse cual es la claridad de esa consciencia. La consciencia puede compararse a la superficie o a la piel de una vasta zona inconsciente cuya extensión sería desconocida. No sabemos hasta donde reina el inconsciente, porque de él no sabemos nada. Cuando decimos "el inconsciente" creemos que por éste término hemos designado algo consistente, en realidad, lo que designamos así no es más que el hecho de no saber de lo que se trata. No tenemos sino las pruebas indirectas de la existencia de una esfera mental subliminal. Algunas razones científicas permiten expresar la conclusión según la cual esta esfera existe. A partir de las producciones de la psique inconsciente es posible para nosotros sacar conclusiones sobre su naturaleza, pero hay que tener cuidado de que esas conclusiones no sean muy antropomórficas ya que podría muy bien ser que la realidad esté lejos de lo que nuestra consciencia pueda concebir.

Si uno compara el mundo físico tal cual es y la manera en que nuestra consciencia lo interpreta, se descubre toda clase de imágenes mentales que estan muy lejos de los hechos objetivos. Por ejemplo, vemos colores y oímos sonidos cuando en realidad son oscilaciones. En verdad haría falta un laboratorio equipado de una manera compleja para hacerse una imágen de este mundo que esté desatada de nuestros sentidos y de nuestra psique. Supongo que es lo mismo con nuestro inconsciente: nos haría falta un laboratorio que, gracias a métodos objetivos, nos permita establecer como las cosas son realmente cuando están en el estado inconsciente. Guardemos entonces estas reservas en nuestro espíritu a todo lo largo de mi exposición cualesquiera sean mis conclusiones o mis afirmaciones sobre el inconsciente. El inconsciente no se presentará jamás de otra manera sino  como sí   y esto es un límite que no hay que olvidar jamás.

Además el consciente se caracteriza por cierta estrechez; sólo puede tratar simultáneamente un pequeño número de aspectos a la vez, mientras que todo el resto permanece en el inconsciente. Solo obtenemos una especie de continuidad, de comprehensión general o de despertar al mundo consciente, gracias a la sucesión de esos momentos de lucidez. Es imposible aprehender una imágen de la totalidad porque nuestra consciencia es muy estrecha, no podemos percibir sino destellos de la existencia. Es como si observaramos a través de una rendija y solo vieramos un momento particular: de todo el resto que está en la oscuridad en ese momento no percibimos nada. La extensión del inconsciente es gigantesca y sin discontinuidad mientras que la de la consciencia es el campo estrecho de una visión momentánea.

La consciencia proviene esencialmente de nuestra percepción y de la orientación que es la nuestra en el mundo externo. Ella está probablemente localizada en el cerebrum cuyo orígen es ectodérmico y que en nuestros lejanos ancestros debía ser sin duda un órgano de los sentidos de la piel. La consciencia que proviene de esta localización del cerebro ha conservado probablemente de ella las cualidades de sensación y de orientación.


Con asombro, los psicólogos franceses e ingleses de principios de los siglos 17 y 18 han tratado de hacer derivar la consciencia de los sentidos, como si la consciencia consistiese solamente en un dato sensorial. Es lo que expresa la célebre frase Nihil est in intellectu quod non fuerit in sensu. Se observa algo similar en las teorías psicológicas modernas; Freud, por ejemplo, no hace derivar la consciencia de los datos de los sentidos, pero hace derivar el inconsciente del consciente; tenemos aquí una lógica análoga.

Al principio, el concepto de inconsciente designó solamente el estado de contenidos olvidados o reprimidos. En Freud, a pesar de que el inconsciente aparece ya - al menos metafóricamente - como sujeto actuante, en esencia solo es el receptáculo de esos contenidos olvidados y reprimidos, solo tiene valor en función de ellos.

En lo que me concierne, presentaré las cosas de manera inversa: diré que, a todas luces, lo que es primero es el inconsciente y que la consciencia nace de ese estado de inconsciencia. En la pequeña infancia somos inconscientes. Las más importantes funciones instintivas son inconscientes, y la consciencia es en suma producto del inconsciente. Ser consciente implica un esfuerzo muy grande. Uno se cansa de ser consciente, nos agota. Al límite este esfuerzo no es natural.

Lo que es importante en lo que concierne a la consciencia es que nada puede ser consciente que no esté referido al yo. Si algo no esta atado al yo entonces no es consciente. Se puede definir la consciencia como la relación que existe entre los hechos psíquicos y el yo. El yo es complejo, descansa ante todo sobre el hecho de ser consciente de nuestro cuerpo, de nuestra existencia, así como del recuerdo que guardamos de los hechos: tenemos una cierta idea de "haber sido" y una larga serie de recuerdos. Estos dos aspectos forman lo esencial del yo. Se puede decir del yo que es un complejo de datos psíquicos. Tal como un imán, el yo ejerce una potente fuerza de atracción que atrae por una parte los contenidos del inconsciente, ese mundo oscuro del que no sabemos nada, pero también las impresiones que provienen del exterior. Solo cuando los contenidos se asocian al yo se vuelven conscientes sino no lo son. 

Por mi parte creo que el yo es una especie de complejo. Es nuestro yo, claro, el mas íntimo y querido complejo, el que más tiernamente amamos. Está constantemente en el corazón de nuestra atención y de nuestros deseos y constituye el centro absolutamente indispensable de la consciencia. Si se disocia como en la esquizofrenia, todo sentido de los valores se desvanece y la reproducción voluntaria de las cosas se vuelve imposible. El centro al dividirse, ciertas partes se atan a un fragmento del yo, mientras que otras se combinan con otros fragmentos del yo. Esta es la razón por la cual se observa en el esquizofrénico cambios rápidos de una personalidad a otra.


La consciencia posee númerosas funciones que le permiten orientarse bien hacia lo que es exopsíquico o a lo que es endopsíquico. Entiendo por exopsique el sistema de relaciones que existe entre los contenidos de la consciencia y los datos que llegan del ambiente que nos rodea. Se trata de un sistema de orientación que nos permite gerenciar los hechos externos percibidos por nuestros sentidos. Del otro lado, entiendo por endopsique el sistema de relaciones que existen entre los contenidos de la consciencia y los procesos del inconsciente que no podemos sino suponer.

Las funciones exopsíquicas son el pensamiento, el sentimiento, la sensación y la intuición; pero ellas no intervienen en nuestra relación con lo que es de alguna manera por debajo del yo. El yo no es más que una parcela, un átomo de consciencia que flota sobre un océano de cosas oscuras. Esas cosas oscuras son las que residen en el interior. Sobre el lado interno se encuentra una capa de acontecimientos psíquicos que forman una especie de franja de consciencia alrededor del yo. Si suponemos una linea vertical que sería el umbral de la consciencia tendremos por un lado una superficie de consciencia que corresponde a la consciencia que tenemos del mundo exopsíquico es decir el mundo regulado por las funciones descritas anteriormente. Pero del otro lado del umbral de la consciencia tenemos el mundo de la sombra. Ahí, el yo es en cierto modo oscuro, no vemos nada en el interior, somos una enigma para nosotros mismos. He aquí porqué descubrimos constantemente cosas nuevas sobre nosotros mismos. Esto nos muestra que existe siempre una parte de nuestra personalidad aún inconsciente y en devenir. No somos seres finitos, estamos en crecimiento y en transformación.

Los contenidos exopsíquicos de la consciencia se originan primero del medio ambiente a través de las informaciones que vienen de los sentidos. Luego esos contenidos provienen igualmente de otras fuentes como la memoria y los procesos de juicio que forman parte de la esfera endopsíquica. Una tercera fuente de esos contenidos conscientes es la esfera oscura de la psique, el inconsciente. Se tiene acceso a ellas gracias a las características de las funciones endopsíquicas, funciones que no estan bajo el control de la voluntad. Son el vehículo por el cual los contenidos inconscientes alcanzan la superficie de la consciencia.


Los procesos inconscientes no son directamente observables, pero las producciones inconscientes que franquean el umbral de la consciencia pueden dividirse en dos categorías. La primera contiene un material que se reconoce por su origen francamente personal: son los contenidos que provienen de adquisiciones individuales o de procesos instintivos que forman el conjunto de la personalidad. Además de los contenidos personales, se encuentran los contenidos olvidados y reprimidos, y los contenidos creadores. En sí no tienen especificidad particular. En ciertas personas pueden ser conscientes. Hay gente que son conscientes de cosas de las que otros no. Llamo esta categoría de contenidos el subconsciente o el inconsciente personal, porque hasta donde se pueda juzgar, está enteramente compuesto por elementos personales que constituyen la personalidad en su conjunto. El inconsciente personal es esa parte de la psique que contiene todos los elementos que podrían también ser conscientes. Nada en esa esfera particular es necesariamente inconsciente para nadie. Algunos de nosotros están efectivamente conscientes de casi todo lo que un hombre puede ser consciente. El inconsciente personal es algo muy relativo, y se puede reducir su círculo hasta volverlo tan estrecho que se vuelva nulo.


Hay luego una categoría de contenidos de orígen decididamente desconocido, o en todo caso cuyo orígen no puede resultar de una adquisición individual. Esos contenidos tienen una particularidad completamente fuera de lo común: es su carácter mitológico. Es como si proviniesen de un modelo que no correspondería a nadie, ni de un espíritu particular sino a la humanidad en general. La primera vez que encontré tales contenidos me pregunté en verdad si no eran a lo mejor debidos a la herencia y si no podían explicarse como una marca étnica. Con la finalidad de aclarar esta interrogante, me fui a los Estados Unidos para estudiar los sueños oníricos de Negros no mestizados. Tuve el placer de constatar que esas imágenes nada tenían que ver con lo que se llama la herencia de la sangre o de la raza, ni con lo que un individuo puede adquirir personalmente. Pertenecen a la humanidad en general y son entonces de una naturaleza colectiva.


Esos motivos colectivos los he llamado arquetipos. Un arquetipo es un typos (una huella) , una agrupación precisa de características arcaicas que contienen bien en la forma como en el fondo motivos mitológicos. En su forma más pura los motivos mitológicos aparecen en los cuentos de hadas, los mitos, las leyendas y el folklore. Ciertos motivos son bien conocidos: las figuras del Héroe, del Salvador, de la Ballena que se traga al Héroe, el descenso en la caverna que expresa el mecanismo psicológico de la introversión de la psique consciente hacia capas más profundas de la psique inconsciente. De esas capas provienen los contenidos de carácter impersonal y es por esto que los llamo el inconsciente colectivo o impersonal.

El simbolismo de esas imágenes y de esas ideas no se enseña ni en los liceos ni en las universidades. En lo que me concierne, lo he estudiado durante años a partir de un material que he debido buscar por mí mismo. Cuando lleguemos a la técnica de análisis de los sueños oníricos, estaré forzado de referirme al material mitológico, lo que os dará una idea de lo que es verdaderamente un trabajo de investigación sobre los paralelos que se pueden establecer frente a las producciones del inconsciente. Por el momento debemos simplemente contentarnos con la afirmación de que existen motivos mitológicos en esta capa del inconsciente, que producen contenidos que no se pueden imputar al individuo y que inclusive pueden ser totalmente en contradicción con la psicología personal del soñador. Por ejemplo, los niños hacen sueños oníricos con símbolos increiblemente profundos que nos hacen reflexionar a tal grado que uno se dice: "¿Pero como es posible que un niño haga tal sueño onírico?". La explicación es sencilla. Nuestro espíritu tiene su historia, así como nuestro cuerpo tiene la suya. Millones de personas no saben que tienen un thymus, y sin embargo tienen uno. Como nuestro cuerpo, nuestro inconsciente es un depósito de reliquias y de recuerdos del pasado. Un estudio de la estructura del inconsciente colectivo revelaría los mismos descubrimientos que los efectuados en anatomía comparada. No se necesita para esto introducir la mística. 

Los métodos utilizados en la investigación de contenidos provenientes de procesos psíquicos inconscientes son: el método de asociación de palabras, el de análisis de los sueños oníricos y el de la imaginación activa".

Nota:  Estas palabras fueron dichas en 1.935. Posteriormente C.G.Jung precisó mejor algunos de los conceptos expuestos ut-supra, por ejemplo la diferenciación que hará entre las imágenes en forma propia y los arquetipos.










28/12/11

El Corazón

"El Corazón significa el Centro más profundo de nuestro ser, es el substrato sin el cual nada podría existir. Es la Consciencia pura e indivisible que no puede ser descompuesta en partes, no posee ni forma ni "interior" ni "exterior". Este Centro es espiritual, nada tiene que ver con el corazón físico que hace circular la sangre y que se designa con el mismo nombre. El Centro espiritual del Corazón no es un órgano corporal, sólo se puede decir una cosa: constituye el hogar mismo de nuestro Ser. 

La Consciencia pura que es el Corazón incluye en ella todo lo que existe: nada puede ser exterior a ella, está fuera del tiempo y del espacio y trasciende lo mental. Es la fuente última de la consciencia que subsiste sin cambio durante los tres estados de la mente: vigilia, sueño onírico, y sueño profundo (sin sueño onírico)."

Ramana Maharshi

 

13/11/11

El eje ego - Sí Mismo

Según el relato del Génesis ... "y el Señor formó al hombre del polvo del suelo y sopló en sus narices el aliento de la vida y el hombre vino a ser alma viviente. Y el Señor habia plantado un jardín en Edén al oriente y puso allí al hombre que habia formado". Génesis Cap.2 ver. 7 y 8

"Y el Señor mandó al hombre diciendo: "de todo árbol del jardín podrás libremente comer; mas del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque en el dia que de él comieres ciertamente morirás". Génesis Cap.2 ver. 16 y 17.

Luego viene la creación de Eva que el Señor hizo de la costilla de Adam y la tentación de la serpiente ..."y la serpiente dijo a la mujer: "Morir no moriréis". Antes bien sabe Dios que en el dia que comiereis de él, vuestros ojos se abriran, y sereis como Dios, conocedores del bien y del mal". Génesis Cap.3 ver. 4 y 5.

... "Y dijo el Señor: he aqui que el hombre ha venido a ser como uno de Nosotros, conociendo el bien y el mal; ahora pues, no sea que extienda su mano y tome también del arbol de la vida, y coma y viva para siempre". Génesis Cap.3 ver.22.

Dice Edward E. Edinger ..."El Jardín del Edén representa la unidad original con la naturaleza y la deidad. Es el estado inicial, inconsciente, estado carnal de ser uno con el propio Sí. Es paradisiaco porque la consciencia no ha aparecido aún y por lo tanto no hay conflicto. En el drama de la tentación y caida todo empieza porque Adam y Eva osaron actualizar su deseo de ser como Dios.

Este mito describe el nacimiento de la consciencia como un crimen que aliena al hombre de Dios y de su totalidad original pre-consciente. El fruto simboliza claramente la consciencia. Es el fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal lo que significa que aporta consciencia de los opuestos, la caracteristica específica de la consciencia. Comer el fruto prohibido marca un hito: la transición entre el eterno estado  de inconsciente unicidad con el Sí y la vida consciente en el espacio y el tiempo: en dos palabras el mito simboliza el nacimiento del ego.

Otra caracteristica de la caída en la consciencia es que Adam y Eva se volvieron conscientes de su desnudez, la sexualidad y los instintos en general súbitamente se volvieron tabú y objetos de vergüenza. Dualidad, disociación y represión nacieron en la psique humana simultáneamente con el nacimiento de la consciencia. Pero nuestro examen del mito de la caída no esta completo si lo dejamos con la imágen de Adam y Eva soportando la vida dura en el mundo de la realidad, ganando su pan con el sudor de su frente y trayendo con dolor niños al mundo. Habían dos árboles en el Jardín del Eden, no solamente el árbol del conocimiento del bien y del mal sino también el Arbol de la Vida y verdaderamente el Señor demostró cierta ansiedad por el hecho de que el hombre pueda descubrir el segundo árbol y compartir sus bendiciones. ¿Que puede significar esto? La Biblia nos cuenta que el fruto del Arbol de la Vida transmite inmortalidad, Adam y Eva eran inmortales antes de la caída, pero también eran inconscientes. Si pueden comer el fruto del Arbol de la Vida después de la caida, obtienen ambas, la consciencia y la inmortalidad y el Señor se opone a tal infracción y ... "colocó al este del jardín del Edén los querubines y una espada flamígera que daba vueltas, para guardar el camino al Arbol de la Vida". Génesis Cap.3 ver.24. 

Adam y Eva sacrificaron su comodidad a cambio de una mayor consciencia. La serpiente probó ser en verdad un benefactor en la larga carrera para quienes otorgan mayor valor a la consciencia que al confort. El mito de la caída expresa una pauta y un proceso no solo en lo concerniente al nacimiento original de la consciencia fuera del inconsciente sino también el proceso mediante el cual uno puede transitar entre ambos (consciente e inconsciente) con cada aumento de la consciencia".

..."Existe en el inconsciente un Centro transpersonal, una especie de consciencia latente y de intencionalidad obscura. El descubrimiento de este Centro, que Jung llamó el Sí, se asemeja al descubrimiento de una inteligencia que se sitúa más allá del plano puramente terrestre. El hombre no está más solo en el universo psíquico y en el cosmos. Las vicisitudes de la vida adquieren un sentido nuevo y más amplio. Los sueños oníricos, los ensueños, las enfermedades, los accidentes y los eventos coincidentes se convierten en mensajes potenciales enviados por un Compañero invisible con el cual compartimos nuestra vida. El encuentro con el Sí es hablando en forma propia una derrota del yo (ego); pero con perseverancia y Deo volente, la luz nace de las tinieblas. Uno encuentra al "Eterno" que hiere y cura, que rebaja y eleva, que empequeñece y engrandece, en una palabra el que hace de nosotros una totalidad".

..."de este modo el ego y el Sí tienen una estrecha afinidad estructural y dinámica. El término "eje ego - Sí Mismo" ha sido usado por Erich Neumann para designar esta vital afinidad fundada en las aseveraciones del Antiguo Testamento:

"Y creo Dios al hombre a Su imágen y semejanza, a imágen de Dios lo creo: varón y hembra los creo" Génesis Cap.1 ver.27 ...

"Y ¿Que parte (fragmento) me dio Dios de arriba y que herencia el Todopoderoso de las alturas?" Job Cap.31.ver.2

"Y Jacob salió de BeerSheva y fue a Harán.
Y dió con un lugar, e hizo noche allí, porque se había puesto el sol. Y tomó una de las piedras del lugar, y la puso por su cabecera, y acostóse en aquel lugar.
Y soñó: y he aquí una escalera estaba apoyada en la tierra, y su cima llegaba al cielo;  y he aquí que los ángeles de Dios subían y bajaban por ella;  ........  Génesis Cap.28 ver.10,11,12.
.... Y despertó Jacob de su sueño y dijo: "¡Verdaderamente el Señor está en este lugar, y yo no lo sabía!"
Y tuvo miedo, y dijo: "¡Cuán pavoroso es este lugar! No es ésta sino la casa de Dios, y ésta la puerta del cielo." Génesis Cap.28 ver.16 y 17.




26/10/11

La cicatrización de la fractura

"Todos mis pensamientos giran alrededor del Sí como los planetas alrededor del Sol" C.G.Jung

"Se puede considerar al Sí Mismo como un centro, un guía interior, distinto de la personalidad consciente. Pero este centro importante en nosotros es primero una virtualidad innata: puede, en el curso de la existencia, realizarse a un grado mas o menos fuerte según que el yo (ego) está listo a prestar atención a sus mensajes. Al escucharlo, uno se convierte en un ser humano mas completo.

Todo ocurre como si el yo no hubiere sido creado por la naturaleza para seguir indefinidamente su voluntad arbitraria, sino para contribuir a la realización de la Totalidad Interior, prestándole la luz de la consciencia: es el yo quien ilumina el sistema entero porque le permite volverse consciente y por lo tanto realizarse. Pero este aspecto  creador del núcleo psíquico no puede entrar en acción sino en tanto que el yo se despoja de todo proyecto de beneficio y de cumplimiento para acercarse siempre más a su Ser Interior más verdadero y más profundo: debe renunciar a sus fines, a sus proyectos propios para consagrarse a este impulso interior de crecimiento.

El yo es solamente una pequeña parte de la personalidad y como en el átomo, el núcleo, el Centro del átomo es el Sí, el yo sería únicamente uno de los electrones que giran alrededor del Centro.

Reflexionemos un instante al hecho que nuestro yo se apaga cada noche cuando dormimos y que se despierta de nuevo idéntico. ¿ Que es lo que ha preservado esta identidad del yo durante la noche ? Entonces, hay algo, una función psíquica que preserva la identidad del yo. Esta función psíquica que preserva la identidad del yo tiene que ver con la homeostasis completa del psiquismo humano y es ése Centro regulador del alma que Jung llama el Sí. El Sí ... es la totalidad desconocida de la psíque y es también la base del yo individual".


El Sí Mismo aparece a menudo en los mitos, leyendas y cuentos bajo la forma de "un tesoro precioso difícil de obtener". 


Asociado al Sí Mismo ..."hay un factor denominado el saber absoluto que no es un conocimiento que esta ligado al ego  o a un conocimiento consciente tal como lo poseemos, sino mas bien un saber "inconsciente" existente en Sí. Si nos separamos del fundamento instintivo de nuestra personalidad, nos aislamos al mismo tiempo de toda posibilidad de beneficiarnos de ese saber absoluto lo que significa que nuestra capacidad de conocer lo real se encuentra reducida solo a las posibilidades del yo. La falta de comunicación con ese saber absoluto nos priva de toda posibilidad de prever el futuro, de recibir del inconsciente una información cualquiera sobre lo que se va a producir o sobre la manera en que se va a producir. En efecto, tratar de captar el saber absoluto constelado en el inconsciente colectivo es vital para cada uno de nosotros como para el primitivo. Nos encontramos igualmente en todo momento en situaciones en donde nuestra apreciación racional de los hechos se revela insuficiente por encontrarnos sin cesar expuestos al surgimiento de un número infinito de acontecimientos inesperados".

Marie Louise Von Franz


Cuando el hombre no encuentra directamente en su propio Corazón el saber absoluto no sujeto al error, el tesoro precioso que es Discernimiento iluminador y guía interna, entonces busca y acude a intermediarios, ciencias mánticas etc...


En la Tradición Judía este saber absoluto es denominado "Dáat Elión" (Conocimiento Supremo) es decir la facultad que conecta el entendimiento oculto del Corazón con la revelación concreta en el pensamiento.

9/3/11

Palabras de un hombre de acción

Gandhi que fue uno de los principales instrumentos de la emancipación de la India del yugo colonial inglés dijo las siguientes palabras que fueron publicadas en el diario "Harijan":

"Que misteriosos son los caminos de Dios. Este viaje a Rajkot ha sido una maravilla aún para mi. ¿Porque es que voy hacia adelante? ¿Hacia que se dirigen mis pasos? En verdad no he pensado en esos problemas. ¿Si Dios me dirige efectivamente porque debería pensar y que debería pensar? Incluso el pensamiento del hombre es un obstáculo a que se deje perfectamente conducir por Dios. Cesar de pensar no necesita ningún esfuerzo. Simplemente los pensamientos no surgen más. Verdaderamente no hay ningún vacío mental. Lo que quiero decir es que no tengo ninguna idea, ningún pensamiento en cuanto a la misión que debo llevar a cabo".


"Gandhi se sometió a la Divinidad y ha trabajado en consecuencia sin interés personal. No se preocupa por los resultados : los acepta como surgen. Esta debe ser la actitud de los que trabajan por la nación". Ramana Maharshi

11/2/11

El momento más bello de la vida

El momento más bello de la vida es el último momento ...

Este momento, en que te detienes para leer la sentencia con que comienza esta página, es precioso para ti porque, sea cual fuere el estado de ánimo en que te encuentres, ésta frase despierta en ti, como campana de bronce, la magia de tu atención: es tu último momento, este momento! Acostumbra a vivir plenamente este momento, sácalo del tiempo y hazlo eterno y serás tu tambien eterno; perderas el temor, serás libre ... Ayer no existe, ayer es una tumba, no te ates a las cosas muertas: las cosas muertas ya no tienen remedio: la muerte ya pasó, no vuelve; el pasado es muerte. Mañana no existe: le damos vida en nuestra imaginación, la imaginación es loca, domina esa loca y conviertela en tu esclava para las cosas grandes de tu mente positiva. Palabra vana es "mañana" , palabra vana es "futuro". Tu puedes hacer el futuro, pero lo tienes que hacer en este momento: no lo dejes para después: haz tu futuro ya! ...

Este momento es el más bello de tu vida y el más poderoso: estás despierto y lo que haces en la vida despierto es inmortal, queda fuera del tiempo y del espacio.

O.T.S.

3/2/11

El Secreto

"El Secreto no tiene ninguna necesidad de velarse. Está en cada uno de nosotros. Es individual, en el sentido que siendo experiencia intima, es intransmisible: cada quien debiendo hacer la experiencia de él por cuenta propia. Es al mismo tiempo el bien de todos ya que todo ser puede acceder a su propia verdad. Su propagación no depende de una voluntad individual o de medios exteriores los cuales, a lo más, pueden indicar el camino y provocar el deseo de iniciar la búsqueda. Pero aquel que vive su propia verdad actúa de manera justa y se vuelve, aún sin quererlo y a veces sin saberlo, fuente de una irradiación que actúa sobre aquellos que se le acercan".

Francine Saint René Taillandier