22/9/13

La Respiración

Por una parte, la reforma y el ordenamiento interno de uno mismo engendra automáticamente un cambio en nuestro entorno social. Al clarificar, sin engañarnos a nosotros mismos, las intenciones y los móviles que impulsan y originan nuestros actos, los eventos y los acontecimientos en nuestro ámbito de acción caerán y se producirán en forma justa y se pondrán correctamente en su lugar. Para el logro de este esclarecimiento un cerebro bien oxigenado es requisito indispensable.

La gran mayoría de las pautas de reacción que contribuyen a la conservación de la vida del cuerpo físico son instintivas: no tenemos control sobre ellas: salvo la respiración.

Generalmente respiramos inconscientemente, sin utilizar la plena capacidad pulmonar, lo que ocasiona una oxigenación deficiente de la sangre y consecuentemente un cerebro desnutrido. Pero si queremos, podemos imprimir un ritmo a la respiración. Respirar bien es igual a respirar en forma rítmica, acompasada. Necesitamos un cerebro bien nutrido, bien oxigenado, en su máxima capacidad y esto se obtiene cuando respiramos bien. Una buena respiración, es decir una respiración rítmica es requisito ineludible para serenarse, relajarse, concentrarse y abordar el ordenamiento interno.

Por otra parte, la mente es el caballero y la respiración es la montura (el caballo). El control de la respiración trae como consecuencia el control de la mente o sea impedir su divagación. Un ingeniero nunca haría calentar un caldero agujereado antes de haberlo hecho restañar perfectamente, pues sabe que el vapor se escaparía baldíamente, sin producir el resultado esperado. La regulación de la respiración es obtenida observando sus movimientos, del mismo modo si uno vigila la mente los pensamientos dejarán de elevarse. De aquí el aforismo que dice: "es victorioso en el combate aquel que escucha el galope de su caballo".

Control de la respiración es igual a control de la mente y viceversa. Los pensamientos y la respiración son dos aspectos diferentes de una misma corriente de la que ambos dependen: la Vida.

La Paz es el estado natural. La mente obstruye la paz inherente interior. 

4/5/13

Una visión de la Realidad

" ¿ Cual es la naturaleza de la Realidad ?

- La existencia sin comienzo ni fin, eterna.

- La existencia en todas partes, sin límites, infinita.

- La existencia sobre la cual descansan todas la formas, toda la materia y todo el espíritu. La variedad (los fenómenos) cambia y desaparece mientras que el Uno sin segundo dura eternamente.

- El Uno sin segundo que sustituye las triplicidades, es decir el conocedor, el conocimiento y lo conocido que son apariencias que se desenvuelven en el espacio y en el tiempo, un espejismo que esconde la Realidad que se extiende más allá y detrás de ellas.

El Sí es el Corazón. ¿ Que es el Corazón ? Es el centro del Sí. El Sí es el centro de los centros. El Corazón es el centro psíquico y no el centro físico. El Corazón es luminoso por sí mismo. La luz parte del Corazón y luego alcanza el cerebro que es la sede de la mente. El mundo es percibido por la mente, es decir gracias a la luz del Sí que en ella se refleja. Cuando la mente es alumbrada, toma consciencia del mundo. Si la mente está orientada hacia la fuente de luz, el conocimiento objetivo es abolido, y el Sí sólo permanece como Corazón resplandeciente. La luna brilla gracias al reflejo del sol. Cuando el sol se acuesta, la luna se vuelve útil para revelar la existencia de los objetos. Cuando el sol se levanta, nadie necesita más a la luna a pesar de que su pálido disco permanece todavía visible en el cielo. Igual es para la mente y el Corazón. La mente es útil en razón de la luz que en ella se refleja lo que permite ver los objetos. Cuando la mente está tornada hacia lo interno, la fuente de su iluminación brilla ella misma y la mente palidece y no sirve más para nada a semejanza de la luna en pleno día."

Ramana Maharshi

11/3/13

La Paz del espíritu

"Si deseas la paz del espíritu, no veas los defectos ajenos; ve mas bien los tuyos! Aprende a considerar que el universo todo entero no es diferente de ti misma; hija mia nadie es extranjero a ti: el mundo y tu misma es una misma cosa! "

Sri Sarada Devi